27/6/12

Lo tuyo es mío y lo mío es tuyo.

En un mundo que ya no existe y de un tiempo que nunca podrás comprobar si es cierto, habían dos personas de países distintos que se conocieron a través de un agujero en sus podridos muros. Siempre se miraban de reojo, haciendo ver que, cuando el otro observaba,  no se daban cuenta.

No se conocían prácticamente de nada, pero en cada mirada se podría comprobar como el cariño era único, como si cada parpadeo fuera una caricia... Pero todo lo bonito les era arrebatado: los muros cayeron al hacerse débiles, pensando que no necesitaban protección el uno del otro. Tan mala suerte tuvieron que cayeron los escombros encima de cada uno. El muro de él en el de ella, y el de ella en él...
Pero fueron felices ya que fueron capaces de compartir sus mayores temores y superarlos.

21/6/12

En los cuentos, sonreír de verdad es cosa del pasado.

Ponte los tacones y empieza a recorrer las calles por las que jugabas cuando la inocencia todavía te acompañaba.

Ahora da igual quienes sean tus amigos, todos opinarán que con los labios rojos buscas la carne ajena para satisfacerte... Y es que las calles no se hicieron para alguien como tu, pequeño torbellino de emociones, donde sin hacer nada te tratan de guarda esquinas.

Con las pestañas alargadas para espantar cada lágrima que pueda salir de esos cristales que reflejan la luz del miedo hacia el exterior. Esos dos ojos que nadie es capaz de leer, que me estremece el frío de las palabras de los demás.
Me creo las mentiras, creo que soy aquello que dicen de mi que es lo peor. Me derriban, me quieren hacer experimentar algo que no es propio en mi.

Lo único que sigo buscando es la madurez, la comprensión, la interpretación... Alguien que despeje las dudas ajenas, que no se crean lo que no soy, que mis labios callen las burradas que mi timidez quiere gritar.

Quiero que el mundo deje de ser como es, quiero escaparme muy lejos.

En las calles todos opinan sin conocer... Y los que conocen solo quieren dañar a los demás para aliviar su dolor.
De mis heridas ya solo brotan las ganas de llorar, las lágrimas que mis ojos reprimen.

11/6/12

No existe la distancia cuando nos perseguimos

Dime, ¿es que acaso en esta vida no todo consiste en sufrir?

Todo parece indicar que no conozco otra manera de afrontarme a la vida si no es de en error en error, con pequeños sacos de alegría en mis bolsillos, y queriéndome acerca a la gente que me puede destruir.

Por lo general, la gente que es capaz de hacerme pedazos, disfruta de ese poder. Ya lo tengo comprobado.

Un día cualquiera, y por primera vez en mi vida, me hicieron ver que las diferencias a veces son las que deberían hacerme ver que puedo llegar a ser un pequeño títere en manos de la experiencia ajena. Creo que repacacité; hasta que vi que tu, siendo mi destrucción, huías para no hacerme daño.

Cuando el que sabe que tiene poder se niega a usarlo... ¿Qué sucede? ¿Es lo mismo de siempre?
Es diferente.
Es alguien que se conoce y sabe que la distancia es el mejor remedio.

Es esa singularidad  la que me hace querer descubrirte.

4/6/12

Acércame

Tú eres la luz y yo el insecto.
Ese brillante misterio que tienes hace que solo pueda avanzar hacia ti.
Deseo que llegue el momento de que me abraces con tu calidez, de verte de cerca y saber que las piedras que he encontrado por el camino no me han hecho perderte, como yo creía.

Todos me dicen que me aleje de ese destello, que me quemaré... Que me quemarás, haciéndome ver que todo lo que tu me atraes es proporcional al hecho de que soy, a tus ojos, un insecto más con ganas de encontrarse con sus sueños en un estado de vigilia.

Yo solo vine para que me hables (y para ser alguien que sobresalga de tu multitud.)