9/3/11

Alas hechas de mentiras

Me avisaron de que me darías la oportunidad de tocar el cielo. Contigo todo era soñar y volar... pero en el momento que quisiera separarme de tu regazo te convertirías en el lobo más feroz y con tus garras, me arañarías hasta que el dolor fuera insoportable. Mi única cura a las heridas, por desgracia, eras tú.

Me hacías creer que compartías ese cielo azul cristalino conmigo... y lo único que me diste fueron alas llenas de mentiras. Mis palabras no tenían ningún valor. Mis actos eran rechazados. Hiciste nacer por un instante a la ilusionista que un día maté.

Seguro que hasta lo que más ansío en este instante, también fue mentira.

Ni siquiera sé porque estoy escribiendo esto.

4 comentarios:

Pía Baroja dijo...

Resulta paradójico que lo que más bien nos hace sea lo que más nos mate. Por desgracia es así.
¡Ánimo! Tú vales más que estar subyugada por el amor.

Malkev dijo...

Escribes porque te quema por dentro, escribes porque así escapas de tu habitación en llamas, escribes porque así cierras la puerta y con suerte las llamas se terminaran ahogando.

Los ilusionistas nunca mueren, se engañan y se esconden en su cabecita, acorazan su alma por temor a que vuelva a suceder todo, y releen una y otra vez el cuanto que creían haber vivido, pero nunca mueren.
El problema de los cuentos, es que, cuando los cuentas, olvidas o ignoras los pequeños detalles que hicieron de la historia algo mas humano. La cenicienta nunca afirmo tener ampollas en los talones por sus zapatos de cristal, blancanieves no contaba lo cerdos que pueden llegar a ser siete enanos viviendo solos, y no me atrevo ni a mencionar como debía estar Bella...
Tu y muchas mas otras tantas princesas, se limitar a recordar los momentos bonitos de cuando su príncipe les salvo de una vida miserable, ignorando como eran unos borrachos, la tenían pequeña o se tiraban pedos sin parar.
Olvidate de las veces que has volado y centrate en las veces que te quedan por volar, que el cuento solo acaba de empezar. No vivimos en un mundo de ensueño, la gran mayoría de tíos somos unos capullos integrales y las tías unas zorras absolutas, pero quedan príncipes y princesas de sobra para tapar tu cielo cristalino con sus alas de sinceridad.

Realmente, estoy cansado ya de hablar a ciegas sobre según que, me debes un cuento, y espero que sea interesante, que no lo quiero para dormirme. ^_^

PD: Perdona el tocho y la ñoñez suprema... ¬¬

Mandarinapop dijo...

Guapaaa :)
me he hecho un nuevo blog (Olor a mandarinas ha sido cruelmente deshechado D: jaja)

O sea que te sigo con este :)
Sobra decir que me encanta todo lo que escribes y que sigas así, expresando lo que sientes. Además, es genial :)

un besazo fortísimo (L)

Anónimo dijo...

todo el rato con lo mismo amor...el amor duele y quema...hoy escuche un refrán que me gusto mucho era algo así como deja marchar a tu amor si el vuelve es por que te pertenece y si no regresa es que nunca te perteneció...o algo así pero bueno yo por lo menos me intento aplicar el cuento.
un besoteee!!