Sin disfrutar del poco tiempo que le quedaba a su corazón por palpitar las ilusiones.
Vivía a las afueras de la ciudad, en un lugar acogedor. Vestía zapatos rosas y una larga cara, nunca sonriente - tenía vergüenza de sus dientes. Con sus zapatos por guía, visitaba la ciudad. Paseaba por las calles con vida para sentirse parte del mundo, todavía.
Se veía reflejada en los escaparates. Se sentía hipnotizada por su imagen...una imagen masacrada.
Se tocaba la cara y contaba sus arrugas. Tras eso, su lacio pelo recogido en una trenza. Nunca miraba más allá de su rostro.
Tenía su propio sitio en aquel lugar. Sentada durante horas, veía la gente triste por no conseguir lo que querían, por no tener suficiente dinero para un capricho. Por no ser sus sueños.
Al caer la noche, volvía a su morada.
Ese mismo día, decidió escribir su testamento.
No tenía nadie que recibiera lo poco que tenía. Así que escribió una lista de las cosas que tenía y después lo firmó.
Volvió a la ciudad. Se sentó en su lugar unos instantes y después se fue, dejando atrás sus zapatos para alguien que los necesitara más. Ella no tenía más calles que recorrer.
Giraba la vista para comprobar si seguían ahí y cuando volvió a mirar al frente, un gran foco la iluminaba.
"Tengo unos zapatos que recogen mis recuerdos y algo de vida en mi interior que nunca me corresponderá. Nunca he necesitado más.
Firmado, Selena"
Fue su pacto con la muerte.
4 comentarios:
El otro día me encontré un par de zapatos tirados (y no es broma). No serían los tuyos, no? XD
http://www.youtube.com/watch?v=6Z8cnXVGm1I
nadie debería terminar como Selena, supongo que es "falta de personas sensatas en este mundo (relativo?)".
pd: la entiendo un poco, amí tambien me dan verguenza mis dientes.
he escrit una entrada molt filosòfica. segur que si això ho hagués escrit a selectivitat no hagués tret un 4'5........ jajajaja
un 4'5 a filosofia dic xd
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