Las doce. La hora de volver a casa de la Cenicienta, la hora de las brujas, la hora que se pasa de la mañana al mediodía o del día X al día Y.
Hoy, a parte de todo eso, a las doce de la noche, se cambiará de año comiendo doce uvas cargadas de pecados. Pecados que espero que no se me atraganten.
Una vez eliminados, quedaré absuelta para cometer nuevos pecados - no puedo decir que jamás pecaré...porque no creo en esas palabras tan extremas.
Disfrutad del último día del 2010 y disfrutad de todos los días del 2011, que yo haré lo mismo.
4 comentarios:
Sobre todo los pecados lo traen estas tradiciones: los pecados del consumismo que se traducen en el gastar cientos de euros incluso sin tenerlos...El pecado de las 12 uvas, que tienen su origen en un excedente que había que vender como fuese...
Tengamos un 2011 lleno de pecados, pero más sanos que estos dos ;)
Disfruta el 2011 tanto como seguro que disfrutaste el 2010.
y no te dejes ni una uva, eh, que da mala suerte :P
un beesito.
Feliz 2011, pecadora! (?)
Feliz 2011! Peca todo lo que puedas, que es el ultimo año de la humanidad.
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